La procedencia del término curling se asocia con el antiguo verbo "to curr". El deporte es originario de Escocia y se trata de un juego en equipo donde se requiere de una gran precisión y fuerza. Los propios participantes lo definían como "the roaring game", que traducido al castellano significa "juego rugiente". Esta explicación viene determinada por los sonidos que provoca la piedra cuando se lanza sobre el hielo. Por otra parte, la palabra también va asociada a la trayectoria de la piedra sobre el hielo, es decir, el camino que realiza hasta llegar al objetivo que los jugadores quieren.
¿Cómo se juega al curling?
Obligatoriamente se debe jugar en una pista de hielo. Para ello, se emplean unas piedras redondas y palos de escoba. En cada partido juegan dos equipos compuestos por cuadro jugadores cada uno. A cada deportista se le facilitan dos piedras. Toda pista de curling tiene una meta en forma redonda, que está situada al final de la pista. Por lo tanto, el objetivo será acercar la piedra lo máximo posible al punto central de la meta.
¿De cuántas rondas se compone el juego?
Tiene diez rondas. En cada una de ellas, los equipos deberán lanzar las ocho piedras de granito que tienen a su disposición, respetando el orden de participación. Siempre es necesario hacer un sorteo antes de empezar el juego, de este modo se decide qué equipo va a comenzar.
En definitiva, el curling es un deporte entretenido. Cabe destacar que los propios compañeros de equipo se encargan de barrer el recorrido para que la piedra pueda deslizarse sin ningún problema, alcanzando así su objetivo. Una vez finalizada la ronda, un juez será el encargado de anotar los puntos conseguidos por cada equipo. Ganará el equipo que más puntos haya conseguido al finalizar las diez rondas.
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