La ciencia es uno de los mejores aliados del deporte. Esto es así, debido a que los diversos estudios van arrojando luz acerca de cuáles son las mejoresformas de entrenar y, por lo tanto, de mejorar el estado general del cuerpo. Pues bien, es en este contexto en el que te introducimos la idea del entrenamiento de fuerza reactiva.
Es posible que ya hayas oído hablar de él alguna vez, sin embargo, también es probable que no conozcas todos sus detalles. Por ese mismo motivo, en este artículo te explicamos sus puntos más importantes.
¿Qué es un entrenamiento de fuerza reactiva?
Por decirlo en pocas palabras, un entrenamiento de fuerza reactiva es aquel que trata de centrarse en las contracciones pilométricas . Esto quiere decir que pretende ejercitar la potencia de los ciclos de contracción concéntrica y exocéntrica de los músculos.
Para que lo entiendas mejor es preciso hacer la diferenciación entre:
- Fuerza explosivo-elástica: es aquella que se manifiesta al estirar y contraer los músculos de manera lenta, a una velocidad baja.
- Fuerza reactivo-elástica: es aquella que se manifiesta al contraer y estirar los músculos rápidamente, de forma explosiva, a una velocidad alta.
Pues bien, es este segundo tipo de fuerza el que nos interesa en este momento. Así, estos entrenamientos son los que irán destinados a tratar de mejorar la velocidad, potencia y fortaleza con la que tu cuerpo es capaz de contraer y estirar los músculos a altas velocidades.
Algunas aplicaciones prácticas
Es ahora momento de bajar al terreno práctico para ver en qué deportes se aplica.
El baloncesto y el fútbol
En el saque de banda del fútbol y el pase de pecho de baloncesto se pone de manifiesto la fuerza reactiva del tren superior. Por ese motivo es importante entrenarla. Una manera de hacerlo es, por ejemplo, tomando un balón medicinal y simulando realizar tales movimientos de la manera más explosiva posible.
El atletismo
La salida es uno de los momentos críticos en toda carrera de atletismo. Entrenarla resulta crucial, y nada mejor que hacerlo a través de la fuerza reactiva. Realiza saltos (con o sin peso) de manera rápida a una plataforma. Tu fuerza reactivo-elástica mejorará.
En conclusión, ya conoces exactamente qué es el entrenamiento de fuerza reactiva. Del mismo modo, has podido ver de qué manera puede aplicarse a la práctica de diversos deportes. En todo caso, en tu mano queda el decidirte o no a adoptar tus nuevos conocimientos a tu propia rutina. Ahora es momento de que tú participes, cuéntanos en los comentarios si conoces algún otro ejercicio que sirva para entrenar este tipo de fuerza, o si crees que te va a ser útil todo lo que has aprendido, ¡anímate ya!
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