El NEAT consiste en actividad física no asociada al ejercicio, es decir, toda actividad física que no esté programada. Por ejemplo, subir las escaleras a pie, ir caminando o en bici al trabajo, pasear con tus amigos, realizar las tareas domésticas, etc. Si te paras a pensar, son muchas las actividades que puedes hacer de esta manera.
¿Qué es exactamente el NEAT?
Su nombre viene de los acrónimos en inglés «non-exercise activity thermogenesis », en otras palabras, «actividad termogénica no asociada al ejercicio». Esto se debe a que el ejercicio se entiende como una práctica deportiva planificada, como ir a jugar un partido de tenis o salir a correr solamente para hacer deporte.
¿Y qué es una actividad termogénica? En esto radica el secreto del NEAT. «Termogénica» significa que genera calor, y esto solo se consigue quemando calorías. Casi no es necesario que te digamos qué actividades te generan calor: subir escaleras, caminar deprisa, llevar la compra... seguro que alguna vez has entrado en calor con todo esto. Quiere decir que ya estabas practicando este tipo de movimiento.
Cómo te ayuda a perder peso
Por supuesto, no basta con llevar a cabo estas tareas tan sencillas. Como sabes, lo importante para quemar grasas es que la ingesta calórica sea menor al consumo calórico. Por tanto:
- Intenta no comer más aunque el ejercicio te dé hambre: ¡controla tu apetito!
- Consume alimentos con alto coste termogénico: son alimentos ricos en proteínas y bajos en grasas, como el atún o el pollo. También lo son aquellos que hacen que tu cuerpo convierta más energía en calor, como la canela, el jengibre, el té verde, el cacao, el apio, los espárragos, las guindillas o la mostaza.
Con el NEAT probablemente no conseguirás aumentar la masa muscular, pero sí quemar grasa de manera muy natural y, además, ¡muy agradable en invierno! ¿Te apuntas?
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