Si te gusta el deporte, es muy probable que ya sepas que entrenar teniendo alergia se convierte en una odisea cada vez que llega la primavera. Por ello, te resumimos cuáles son las mejores recomendaciones para poder afrontar este reto con más garantías de éxito.
1. Elige bien cuándo vas a entrenar
Evita los días soleados y ventosos. Si ha llovido por la mañana o por la tarde, entrena cuando el polen se asiente. Recuerda que las plantas lo generan por la noche y que comienzan a desprenderlo en cuanto amanece. Por ello, debes entrenar o bien antes de que salga el sol, cuando el grado de humedad es mayor, o bien cuando atardece.
2. Emplea una aplicación específica
Hay opciones que te permiten detectar cuál es el nivel de polen exacto a lo largo del día. Resulta muy adecuado conocer esta información para elegir el momento que más te convenga y evitar así los síntomas más recurrentes. Aquí te dejamos algunas apps para controlar el polen.
3. La playa, el mejor escenario natural
Tanto en la ciudad como en el campo es bastante habitual que el polen sea prácticamente incontrolable. En la playa cuentas con un grado mayor de humedad y con la ausencia casi total de polen. Además, le aportarás a tu entrenamiento una dosis añadida de resistencia física al correr o ejercitarte por la arena. Conoce estos trucos para ponerse en forma en verano.
4. Repasa los prospectos de los medicamentos que tomas
Los antihistamínicos tienen como principal función abrir los bronquios para que puedas respirar más cómodamente. Pero también aumentan la frecuencia cardíaca y esto puede terminar provocando que tus pulsaciones sean demasiado elevadas para cada sesión de entrenamiento.
Te recomendamos leer bien los prospectos de cada medicación y llevar una pulsera que mida tu actividad física y tu nivel de oxigenación. Modera la intensidad de tu entrenamiento para lograr que tu cuerpo se acostumbre mejor a cada sesión.
5. La importancia de la hidratación
Cuanto más se resequen las mucosas, más probabilidades tendrás de experimentar molestias. Debes hidratarte, con agua, infusiones y fruta, antes, durante y después del entrenamiento.
6. El uso de barreras protectoras
Te aconsejamos que lleves siempre unas gafas para evitar la suciedad y, si tienes que pasar por alguna zona con vegetación, que uses una mascarilla especial para la práctica deportiva. Conseguirás reducir con mayor eficacia tu exposición al polen o a la sustancia que te genera la alergia.
7. Lava tu ropa de entrenamiento y dúchate al llegar a casa
Cuanto antes elimines los alérgenos de tus prendas y de tu cuerpo, mejor. Así, lograrás que tus síntomas se reduzcan y sean más fácilmente controlables con la medicación que tomes.
Esperamos haberte dado las claves necesarias para entrenar teniendo alergia. Pon tu cuerpo a punto y que la primavera no sea un obstáculo para seguir progresando.
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